La compañera Azucena tiene una antigüedad de más de 20 años en la empresa terrorista WTC

de Barcelona, en diciembre de 2017 se encontró que los miembros de

seguridad del centro donde trabaja le impedían el acceso a su puesto de

trabajo, permaneciendo en la calle, durante la jornada laboral, en el

centro de trabajo, para que no pudieran despedirla por no asistir a su

puesto. 

   Ahora le dejan trabajar, pero en la calle sin luz y sin protección,

impidiéndole el acceso a las instalaciones y sin medidas de seguridad

alguna, sin plan preventivo, sin tomas de agua, vetándole el acceso a

los lavabos, sin dejarle entrar a cambiarse o a sacar las cosas de su

taquilla, con tono jocoso, su responsable, riéndose de la situación,

le han puesto sin ninguna compañía y aislada totalmente de sus

compañeras.

 

   Desde CGT Barcelona denunciamos la represión sindical que ejerce WTC Barcelona, una empresa que practica el terrorismo patronal con total impunidad, para que luego digan que las terroristas somos otras.

   Como si tocan a una nos tocan a todas, nos movilizaremos contra cualquier tipo de represión

venga de quien venga.