El Tribunal Supremo, mediante sentencia, avala la subcontratación de trabajadores/as en situaciones de huelga. Concretamente, que los clientes de empresas donde sus trabajadores/as hagan huelga, puedan subcontratar servicios a terceros para continuar su actividad. Es decir, la resolución del Supremo autoriza el esquirolaje.

   Es un ataque gravísimo al derecho Constitucional a Huelga desde la promulgación del Decreto de 1977, y demuestra que el Poder Judicial no es independiente como nos quieren hacer creer, y por lo tanto no juzga de forma objetiva, y muestra que claramente ya no hay máscaras que pretendan ocultar los verdaderos intereses del Estado, que son los mismos que los de la Patronal.

   Si ya ahogaban las huelgas con decreto de mínimos del 100% en servicios no esenciales y criminalización de piquetes informativos, ahora queda clara la dictadura en la que vivimos disfrada de democrácia.

   Desde CGT rechazamos totalmente dicha sentencia y, además de interponer un recurso de amparo ante el Tribunal
Constitucional, llamamos abiertamente a desobedecer aquellas leyes y
sentencias que vulneran los derechos fundamentales. Ahora nos toca a todos y todas ofrecer una respuesta contundente

Ni patrones ni esquiroles, el principal revientahuelgas es el Estado represor.

¡Contra los ataques de clase, respuesta de clase!