CAPITULO III: MUTUAS, LA NUEVA MAFIA EMPRESARIAL
Y seguimos con el culebrón de moda que lo está petando en todos los canales de series del género Thriller psicológico.
Tras haber revocado varias altas como puede leerse aquí y aquí, después de que el ICAM se posicione en que debo seguir de baja, los dioses del Olimpo se enfadan y Ares me vuelve a dar el alta, esta vez sin ni siquiera revisarme.
Así las cosas, todo me hace pensar que en el Olimpo se han tomado mi situación como algo personal, en una carrera para ver quien la tiene más grande, un reto del «y tu más».
Pero este espartano no se rinde y vuelve una y otra vez al Oráculo para que dicten sus votos en forma de revocación.
Por si fuera poco, recibo respuesta del Gran Zeus a la queja que puse.
Lamentan mi insatisfacción y no entienden el porqué de la misma, debido, evidentemente a que he «apreciado los hechos» como a ellos no les gusta, faltaría más, oiga, ya que ellos están actuando correctamente.
Vienen a decir que su Sistema de Gestión de Calidad es el «no va mas», sus semidioses son la hostia, y el Olimpo es el más molón.
Pues nada, acabo el tercer capítulo que me tengo que ir a la batalla de las Termópilas.