El Proyecto VISC+ responde a las demandas de la indústria farmaceutica y tecnológica de liberar datos para potenciar el negocio a nivel internacional.

El 4 de junio del 2013 el Gobierno de la Generalitat de Cataluña aprobó el Proyecto VISC+. Según la nota de prensa publicada en su web, el objetivo de VISC+ es “poner la información sanitaria a disposición de los ciudadanos, las empresas y la investigación”.
Este proyecto relacionará datos recogidos en centros de atención primaria, hospitales, urgencias e incluso recetas electrónicas.

Ya existe algo parecido, de hecho hay programas sobre la historia clínica compartida dentro de la red pública de sanidad para hacer más efectivo el diagnóstico en pacientes con movilidad, o el programa SIDIAP, que ofrece a los investigadores del Hospital Vall Hebrón, Universitat Politècnica o al Institut Municipal d’Investigacions Mèdiques, datos para sus investigaciones.

Pero VISC+ va más allá y es que ofrece algo que los otros proyectos no: Los otros no ofrecen datos a entidades con ánimo de lucro, VISC+ sí, ya que está desarrollado para tener como destinatario principal a la privada.

Josep Mª Argimón, uno de los máximos responsables del proyecto lo explica claramente:
    “VISC+ proporcionará valor aportando mayor capacidad para que las indústrias sanitarias, las farmaceuticas y las biotecnológicas desarrollen su actividad”. Según Argimón la apuesta para hacer participar al sector privado en el proyecto VISC+ tiene como objetivo “la promoción y comercialización de los servicios que ofrece el proyecto”.

Cuando interesa se saltan las leyes de protección de datos, ¿vamos a permitir que nuestros datos circulen libremente por cualquier empresa la cual desconocemos el uso que les pueda dar?