Era lo más sagrado: a los jubilados no se les tocará, pero Rajoy –el
mayor embustero del reino- ha puesto en marcha recorte de pensiones más
drástico que se recuerda.

Ya no se esconde siquiera: el gobierno cifra
en 33.000 millones de € lo que va a “ahorrar” con el tajo del retiro. Para el 2014 ya espera conseguir para las
arcas  810 millones de euros que quita a los ancianos, aunque luego los
dilapide en fastos olímpicos o lo que les cruce por la cabeza.
Ha inventado una fórmula para seguir diciendo que la revalorización sube un 0,25 anual pero si va a “ahorrar” esos dinerales, muy tonto hay que ser para no
entender que de algún lado sale.

Diferentes expertos aseguran que
durante los primeros años los pensionistas perderán en torno a un 0,7% y
un 0,8% de poder adquisitivo anualmente hasta 2019. Luego viene otro
tajo porque se vincularán a lo que ellos entienden por “esperanza de
vida”. Así, no solo dejan en la cuneta a los más débiles de la sociedad, sino a las familias que viven con ellos y que en muchísimos casos se benefician de dichas pensiones.

Recordemos que, con un 92,2% de deuda pública ya -en el más
espectacular ascenso de la historia, 23% desde que el PP entró en el
gobierno-, Rajoy la aumenta 390 millones de euros cada día, 16 millones
por hora. ¿Quién arreglará este desastre? De momento entran en el club
los pensionistas.

En nuestra opinión está situación es insostenible.